LEVANTE
Algunos ha pretendido denominar Levante al país integrado por la
Región de Murcia, con « bastante fortuna», a pesar de su
evidente « incorreción geográfica», tal y como
denunció el geógrafo
Rosselló i Verger. Por otra parte, la
generalización de este término para hacer referencia al conjunto
de las tierras valencianas y murcianas, e incluso almerienses,
hace que quede desvirtuado el significante que lo identificaría
estrictamente con Murcia. Así lo entiende la geógrafa murciana
Fátima Sánchez Galindo: « Aún pervive el anticuado y
confuso concepto de formar parte de una “Región Levantina”,
concepto-obstáculo, sin duda, tanto para los murcianos como para
los valencianos a la hora de afirmar su identidad».
SURESTE
Este nombre hace referencia a la situación geográfica del país
en el conjunto de la Península Ibérica. Sin embargo, su único
fundamento es precisamente ése, el geográfico, olvidando, pues,
todo un acervo histórico y cultural. De él se ha dicho que, al
igual que ocurrió con la propuesta de “Levante” para Valencia,
responde a un punto de vista castellanista y centralizador, pues
la denominación toma como punto de referencia la ubicación de
estos países respecto de Castilla.
Existe otra acepción más amplia que la que se
refiere a las tierras estrictamente murcianas. Concretamente,
con el nombre de "Sureste" se designó a un proyecto regional,
gestado durante el Franquismo, y que estaría formado por el
conjunto de las provincias de Albacete, Alicante, Murcia y
Almería. Tampoco han faltado las críticas a esta propuesta: « de
ciertas raíces climáticas, económicas y políticas, es fomentado
por un Consejo Económico Sindical (Alicante, Almería, Albacete y
Murcia) y con más afán por un periódico y una empresa bancaria»
( Rosselló i Verger, “Múrcia, un país català frustrat?”).
En la actualidad, el término "Sureste" se emplea
para referirse a las tierras que, no perteneciendo
administrativamente a la Región de Murcia, se consideran, a
todas luces, culturalmente murcianas (la Murcia social y
cultural de la que venimos hablando), y hacerlo de una
denominación más "políticamente correcta" que
País Murciano.
SIERRA ALMAGRERA
Éste es el nombre que utilizó Fermín Caballero en su
proyecto de división provincial de 1842 para designar a la
circunscripción situada en la Cuenca del Segura y capitalizada por Murcia. El carácter afrancesado de este división se pone de
manifiesto en que, al igual que los departamentos galos, las
distintas provincias recibían su nombre de un accidente
geográfico (ríos, cabos, etc.); sin embargo, lo más curioso es
que la Sierra Almagrera que le da nombre no está en la provincia de Murcia, sino en la de
Almería, aunque muy cerca del límite entre ambas (municipios de Pulpí y Cuevas del Almanzora). La importancia de esta sierra,
que dio nombre a todo el territorio provincial, derivaba de la existencia en ella de ricas minas de plata y otros
minerales, que desataron la “Fiebre de la Plata”, haciendo de
las poblaciones del Bajo Almanzora unas de las más prósperas e
industriales del Sureste durante el siglo XIX, y llevando a la
emigración masiva de los mineros con su agotamiento, a
principios del XX.
RÍO SEGURA
Con este nombre designó José Antonio Llorente al Departamento
correspondiente al antiguo Reino de Murcia en su proyecto de
división territorial (1809). También de carácter afrancesado,
este proyecto basó la denominación de los departamentos en los
accidentes geográficos más destacados de su territorio, en este
caso, el río Segura. La capital se situaba en Murcia y había
tres subprefecturas (Cartagena, Huéscar y Albacete).
|